Cuando nos llega un proyecto de reforma o de construcción de una cocina o de un baño a partir de cero, en Punt de Vista siempre hacemos la misma pregunta a los clientes. «Los acabados como los desea?». A continuación les ofrecemos las tres opciones existentes: todo con cerámica, todo con pintura o mitad y mitad.

Los hay que lo tienen claro enseguida. Otros se lo tienen que pensar un poco más y nos preguntan «Si fuera tu cocina, ¿qué harías tú?» o «¿cómo lo harías si el lavabo fuera tu?». Después de haber hecho estas preguntas un puñado de veces y con la experiencia de pilotar numerosas reformas, el equipo de Punt de Vista tenemos un puñado de argumentos y los queremos compartir con vosotros.

La cerámica es muy bonita pero puede tener un handicap: pasa de moda muy deprisa. Hay cerámicas muy extremadas que visualmente son muy atractivas pero que al cabo de pocos años se ven anticuadas porque la moda del momento apuesta por otros diseños. Es por ello que a Punt de Vista priorizamos cerámicas más clásicas, mayoritariamente de tonos blancos o grises. En un baño normalmente hacemos la ducha 100% de cerámica y también el frontal del lavabo, ya que es la parte que se salpica. El resto, nos gusta hacerla con pintura por un motivo muy simple: sólo cambiando el color de las partes pintadas puedes tener un baño o una cocina nueva con una inversión mínima. Es mucho más económico pintar una parte que no cambiar la cerámica.

Sin embargo, hemos realizado obras de todo tipo: cocinas y baños 100% de cerámica, cocinas con cerámica hasta la altura de 1,46 metros y el resto pintado, y también baños con cerámica hasta el metro veinte y el resto pintado.

¿Qué opción os gusta más a vosotros?