Siempre que alguien cruza la puerta de nuestra tienda y nos pide que le ayudemos a reformar su casa para que esté en sintonía con su ritmo de vida o momento vital, lo primero que hacemos es preguntarle cómo le gustaría sentirse en casa y cómo se la imagina a diferencia de ahora.

Eso mismo es lo que preguntamos a Luis y Carmen, un matrimonio que pronto se estrenarían como abuelos. Estaban de lo más motivados y creyeron que esta nueva incorporación a la familia era motivo más que suficiente para renovar la cocina de casa y cambiar alguna cosilla más.

En la cocina que tenían, los muebles estaban distribuidos nos forma de U. A pesar de ser una cocina grande tenían poco espacio para faenar en ella. La cocina tenía una ventana que daba a la calle y era luminosa. Sin embargo, Luis y Carmen aún querían más luz. Nos dijeron que la cocina era grande y que querían mantener una pequeña mesa ya que la mayoría de los días comían allí. Escuchamos todas sus peticiones y también visitamos su cocina para ponernos a trabajar de inmediato.

¿En qué consistió la solución Punto de Vista?

Optamos por una distribución en forma de L, de esta manera la sensación de amplitud aumentaba. La parte que quedaba liberada con esta distribución la usábamos para colocar una pequeña mesa cerca de la ventana. Para conseguir que entrara más luz, abrimos otra ventana en la ventana que separaba la cocina del comedor. Decidimos poner un vidrio especial que permite ver hacia fuera desde dentro pero no al revés.

Los colores que escogimos eran de tonalidades terrosas. Los usamos tanto en el suelo como en los muebles. Combinados con el blanco de la pared y el mármol, quedaban fantásticos!

Los muebles que elegimos se caracterizan por tener muchos cajones. La mayoría son muebles bajos para liberar el máximo espacio posible.

Los electrodomésticos que pusimos son de última generación y destacamos la campana inclinada de vidrio, la placa de inducción y el horno pirolítico.

 

Uno de los espacios de la cocina al que le  dimos más vueltas antes de tomar ninguna decisión es la encimera ya que Carmen nos insistió mucho en que quería que fuera un elemento muy sufrido. Ante esta petición, los nuevos porcelánicos son la respuesta más adecuada a estos caso. Resisten a la perfección el calor y los cortes y no cambian de color.

Otro elemento distintivo de la cocina que ideamos es la cerámica con relieve de las paredes. A Lluis y  Carmen les encanta! Y además, ellos se han encargado de decorar la cocina con mucha clase y buen gusto para que quede aún más bonita! Esperamos que la disfruten mucho en esta nueva etapa como abuelos!